sábado, 24 de mayo de 2014

Lagrán – Laguardia. Tramo de GR-38

Siempre hay un buen motivo para visitar el País Vasco y si en el calendario de actividades de “Lo Bisaurin” hay programado un fin de semana montañero-gastronómico-cultural en la provincia de Vitoria cualquier motivo se multiplica. Asi que con la intención de pasarlo bien y de conocer algo más de esta tierra y de sus gentes, el viernes por la tarde pusimos rumbo a la capital Alavesa. Para la jornada montañera estaba previsto acercarse a la sierra de Cantabria, también llamada de Toloño, y hacer un tramo de la GR-38 conocida por el sugerente sobrenombre de “La ruta del vino y el pescado”.


Comenzamos el camino
Bonito hayedo
Replica de una carbonera
Partimos de la localidad de Lagrán, enseguida comenzamos a caminar por una pista asfaltada que discurre entre verdes campos de trigo. Delante nuestro se levanta imponente la sierra de Toloño donde apreciamos perfectamente el Puerto del Toro y aquellos que gozan de mejor vista ya ven la cruz en lo alto del Pico Cruz del Castillo. Tras un par de kilómetros de calentamiento nos metimos en el bosque, un tupido hayedo con gran presencia de boj. El camino se hace muy cuesta arriba pero se lleva bastante bien por el frescor que proporciona el frondoso bosque. En poco tiempo llegamos a un cruce de caminos, tomamos el nuestro sin problemas ya que hay un cartel informativo que despeja cualquier duda y posibilidad de confusión. Siguiendo el ascenso nos encontramos un par de réplicas de carboneras que nos recuerdan que antaño en esta zona se elaboraba carbón vegetal. Continuamos subiendo aunque parece que el desnivel no es tanto ahora, conforme avanzamos nos damos cuenta que la vegetación empieza a clarear y que pisamos roca. Enseguida salimos a una pequeña campa en la que tenemos un bonito primer plano de la Peña Cruz del Castillo y a la derecha una amplia panorámica de la comarca de la Montaña Alavesa, hemos llegado al Puerto del Toro, lugar que aprovechamos para tomarnos un pequeño tentempié.

Los tesoros del bosque
Comarca de la Montaña Alavesa
Puerto del Toro y Peña Cruz del Castillo al fondo
Los más aventureros del grupo nos encaminamos a la Cruz del Castillo. Subimos a fuerte ritmo ya que la mayoría han dejado sus mochilas en el puerto, aun asi paramos unos momentos en un claro del bosque para recrearnos con el paisaje de la llanura de la Rioja Alavesa. Seguimos subiendo hasta llegar a un collado, desde aquí ya solo nos queda el último tramo en el que tenemos que ayudarnos un poco las manos para al fin coronar la Cruz del Castillo (1432m.). Aunque con nubes, el día es relativamente bueno y nos permite disfrutar de unas impresionantes vistas de las que destaca, para mi gusto, la Peña del León.

Vista de La Rioja Alavesa
En el Collado antes de iniciar el ascenso a la Cruz del Castillo
Peña del León
Desde la cima de la Cruz del Castillo
Próximo objetivo, Larrasa
Haciendo las fotos de cima alguien sugiere subir al cercano Pico de Larrasa. No nos lo pensamos mucho y después de un rápido descenso de la Cruz del Castillo ya estábamos encarando el siguiente objetivo que resulto algo más complicado de ascender ya que cuenta con un par de trepadas y el paso de una pequeña chimenea que superamos con tranquilidad y prudencia. En poco tiempo llegamos a la cima de Larrasa (1453m) el punto más alto de la sierra desde donde tenemos una bonita imagen aérea de la Cruz del Castillo. No nos entretenemos mucho ya que el resto de grupo nos está esperando en el Puerto del Toro por lo tanto bajamos a toda velocidad.

Pedro y Jesús en la cima de Larrasa
Vista de la Cruz del Castillo desde la cima de Larrasa
Elena y Kepa bajando por la chimenea
De nuevo todos juntos emprendemos el descenso hacia Laguardia. Los metros iniciales de la vertiente sur del puerto transcurren paralelos a las primeras estibaciones de la Peña de León para luego girar por una estrecha senda que poco a poco se va ampliando para transformarse en pista. Podemos observar que el tipo de vegetación ha cambiado y lo que predomina en esta cara es la encina y el matorral bajo, es curioso el contraste entre la vertiente norte y la sur. La pista es bastante larga y con el transcurso de los kilómetros se nos empieza a hacer aburrida, por lo que buscamos un lugar agradable donde paramos a comer y a descansar.

Bajando del puerto del León
Ultima vista atrás
Yo a lo mio
Otro tipo de bosque
Con el aporte energético hecho terminamos el camino que nos lleva hasta Laguardia por una pequeña carretera asfaltada que va atravesando grandes extensiones de viñedos. Por la tarde, después de una rápida vuelta por el pueblo, visitamos la bodega “El fabulista” donde nos explicaron como elaboran sus caldos utilizando el sistema tradicional y sobre todo nos enteramos de la curiosa forma de entender el vino que tenía la persona que nos enseñó la bodega.

Sierra de Cantabria
Viñedos y bodegas
Plaza de Laguardia
Bodega el Fabulista

Track de la excursión

sábado, 17 de mayo de 2014

De Acumuer a Larrosa

Para terminar de acostumbrar de nuevo las piernas a la montaña hacemos otra corta excursión por un valle poco frecuentado y al que no nos habíamos acercado nunca, el de Acumuer. La excusión más atractiva en este pequeño valle, que discurre paralelo al de Tena, es la del Ibón Bucuesa, pero todavía hay acumulada bastante nieve en altura y los neveros en esta época del año pueden ser algo traicioneros, por lo tanto nos decantamos por hacer una visita al pueblo abandonado de Larrosa.

Río Aurín y Acumuer en lo alto
Marcas de la GR-15
La Collarada a la izquierda y la cara sur de la Sierra de la Partacua a la derecha
Valle de la Garcipollera
Partimos del mismo Acumuer, una vez atravesadas sus calles bajamos por un camino siguiendo las marcas de la GR-15 que nos llevaran hasta el lecho del río Aurín. Buscamos un lugar por donde atravesarlo pero hay bastante agua y no nos queda otro remedio que descalzarnos para pasarlo. Con los pies limpios, frescos y ya con las botas puestas emprendemos una fuerte subida que nos va metiendo entre el bosque, no hay apenas descanso por lo que ganamos bastante altura en poco rato. El camino da algo de descanso cuando salimos a una amplia pista por la que caminaremos unos kilómetros. Como curiosidad decir que esta pista pertenece a transpirenaica en BTT. Mientras avanzamos tenemos unas estupendas vistas de la Collarada y de la cara sur de la Sierra de la Partacua. Al cabo de un rato abandonamos la pista tomando un camino algo peor que desciende de manera suave, en una de las curvas salimos a una especie de balcón desde el que se puede apreciar el valle de la Garcipollera. Algo más abajo, indicada por un mojón, sale una pequeña senda que tomaremos.

Pequeño riachuelo
Ana contemplado el viejo caserón
Rinas de Acumuer
Entrada a la iglesia
De nuevo nos adentramos en el bosque. El sendero desciende sin cesar, al cabo de unos 20 minutos llegamos a la orilla de un riachuelo que cruzamos sin dificultad, apenas llevaba agua. Solo nos queda subir una pequeña cuesta, para detrás de unos setos encontrarnos las ruinas de Larrosa. Sacamos algunas fotos de sus destartaladas casas, nos dimos una vuelta por su iglesia, nos sentamos a comer y a disfrutar del estupendo día. Contemplar estos pueblos abandonados siempre da algo de pena y hace que te des cuenta de lo duros que eran los habitantes del pirineo.

Iglesia de Larrosa
La decepcionante ermita de San Antonio
La vuelta la realizamos por el mismo camino, pero en un momento de la pista nos desviamos para ver la ermita de San Antonio, que nos resultó algo decepcionante. Cerca de esta hay un camino sombrío y agradable por el que descendimos hasta llegar de nuevo al río Aurín.

Track de la excusión.

sábado, 3 de mayo de 2014

Embalse de Cienfuens y dolmen de Belsué

La Sierra de Guara no deja de sorprenderme, cada vez que me acerco a ella descubro lugares encantadores que sin duda merecen ser recorridos.
Para este día pensamos hacer una pequeña excursión hasta el embalse de Cienfuens. Dejamos el coche aparcado a un lado de la carretera a un par de kilómetros pasada la localidad de Belsué. Caminamos por el asfalto un ratillo hasta encontrar un camino de tierra que salía a la derecha. Seguimos por el disfrutando del espléndido día primaveral que teníamos, por primera vez esta temporada nos pusimos los pantalones cortos. En apenas un kilómetro llegamos a la caseta Casa del Romeral desde la que ya se podía divisar el embalse de Santa María de Belsué. Justo a la derecha del edificio hay un barranco que pasamos por medio de un pequeño puente algo destartalado. Seguimos por la estrecha senda que rodea el embalse que resultó ser una delicia, las flores primaverales estaban en su esplendor y la cantidad de aves que se encontraban en las orillas del embalse ponían banda sonora a nuestros pasos.

Comenzamos a caminar
Casa de Romeral
Puente para pasar el barranco
Arboles en flor
Al cabo de un rato llegamos a la presa, antes de seguir avanzando decidimos cruzarla, somos algo curiosos y queríamos saber que nos podía ofrecer el otro lado. Tras admirar el paisaje desde la otra orilla volvimos a la pista principal. Atravesamos varios túneles escavados en la roca para la construcción de los embalses. El barranco nos estaba resultando precioso, había bastante vegetación, teníamos el río Flumen abajo y sobre nosotros unas enormes paredes de roca que servían de morada para los buitres.

Llegamos a la presa
Vista desde la otra orilla
Primero de los túneles
Presa de Santa María
Casi sin darnos cuenta llegamos al embalse de Cienfuens que según nos comentaron fue construido porque el de Santa María tenia filtraciones. Hasta ahora el camino había sido totalmente llano pero a partir de este momento empezamos a ganar algo de altura suavemente. Dejamos atrás los embalses pero a lo lejos a nuestra izquierda pudimos divisar el Salto de Roldan. Algo más adelante tómanos un desvío para visitar dolmen Belsué. Este es otro de los dólmenes funerarios que salpican el pirineo y pre-pirineo.

Interesante paisaje
Cómodo camino
Presa de Cienfuens
Otra vista de la presa de Cienfues
Volvimos al camino que habíamos abandonado y comenzamos una dura ascensión, es corta pero intensa creo que se ascienden unos 210 metros en algo menos de kilómetro y medio. Con bastante esfuerzo llegamos al Collado de la Travesada, a mano derecha sale el camino que lleva al refugio de Peña Guara pero nosotros decidimos continuar bajando por la pista que al final, por larga, se nos hizo algo pesada.

Espectaculares paredes rocosas
A lo lejos el Salto de Roldan
Sobre el Dolmen de Belsué
Vistas desde el collado de Travesada
Quizá hubiera sido más interesante haber ido hacia el refugio y luego haber bajado por los escalones hasta la presa de Santa María, lo dejaremos para otra vez.

Track de la ruta