jueves, 22 de agosto de 2013

Incríble Kilian

Cada vez que leo noticias de las gestas de este hombre alucino. Esta es la de ayer.
No sé si habrá algún problema legal en copiar y pegar el artículo de la revista desnivel.com. si lo hubiera lo quieto inmediatamente en el momento que se me comunique

El corredor de montaña español Kilian Jornet ha conseguido batir esta tarde el récord de ascenso y descenso del mítico Matterhorn, que hasta entonces estaba en manos del corredor italiano Bruno Brunod, que en 1995 consiguiera completar esta ruta en 3 horas y 14 minutos.
Por su parte, el catalán partía a las 15 horas desde la iglesia de la localidad italiana de Cervinia para enlazar con la cima de la montaña, situada a 4.478 metros de altitud, un tramo que completó en un tiempo de 1h56'15", rebajando este parcial en 14 minutos con respecto al de Brunod.Posteriormente, Jornet regresó hasta el lugar de salida parando el crono en 2h52’02”, rebajando así el antiguo record en más de 20 minutos.
De esta forma, Kilian Jornet ha conseguido batir el segundo record del año, tras el conseguido hace unas semanas en la ruta Chamonix-Mont Blanc-Chamonix, por lo que su megaproyecto Summits of my Life ya tiene una muesca más.
Uno de los aspectos más sorprendentes ha sido el mínimo material con el que ha realizado la gesta, ya que en la salida, en Cervinia, sólo iba equipado con pantalón, camiseta, zapatillas y reloj, aunque falta saber si llegaba algún tipo de gel, si bien en un principio podríamos descartar esa hipótesis.
De aquí a finales de año, el español todavía se enfrentará a otro récord, el del Elbrus, la montaña más alta de todas las que ha intentado hasta ahora, con 5.642 metros. En esta ocasión, y al contrario que en los dos anteriores records de este año, Kilian tratará de batir únicamente  el récord de ascensión, que actualmente se sitúa en 3h23’27”.


El Cervino: una cima indespensable en proyecto Summits of My Life
 
Kilian Jornet ha completado hoy el que se consideraba uno de los grandes retos del proyecto Summits of My Life; el ascenso y descenso del Cervino (Italia). Completando el trayecto con un tiempo de 02h52’02’’ y partiendo des del pueblo de Cervinia, Jornet ha establecido de esta manera un nuevo récord de velocidad en esta cima.
Al plantearse las cumbres que Kilian quería coronar con el proyecto Summits of My Life, el Cervino (4.476m.) siempre fue uno de los indispensables en la lista. Para muchos considerado como la montaña perfecta, este pico majestuoso esta situado a la frontera entre Suiza e Italia y recibe el nombre de Cervino por la parte italiana y Matterhorn por la parte Suiza. La cima de esta montaña, de forma piramidal, ha inspirado numerosas gestas alpinísticas.


Kilian Jornet ha hecho el ascenso al Cervino desde la parte italiana, por la ruta de la Arista Lion, en un recorrido dividido en tres partes esenciales. El primer tramo está compuesto por caminos de tierra de montaña, que recuerdan a los de cualquier carrera de trail, y donde la velocidad es la mejor baza para Jornet. En el segundo tramo empieza una parte más técnica con nieve, y es aquí donde las habilidades de Jornet han tenido que afinarse. Finalmente, 1.000 metros separan el alpinista de la cima, en un tramo de escalada de IIIº y IVº con cuerdas fijas, donde las dotes en escalada pasan a ser esenciales. Como comentaba Seb Montaz antes del record: “Este ascenso no es running tradicional como estamos acostumbrados a ver con Kilian, es más bien escalada en solitario. De hecho, va mucho más allá del crono; es una comunión con la montaña, una intimidad con la naturaleza que muy pocos atletas poseen”.


Kilian Jornet ha salido a las 3 de la tarde desde Cervinia, pueblo del Valle de Aosta situado a 2.007m. Se ha escogido esta hora para evitar las posibles heladas que hubieran podido ocurrir durante la noche, además del gran número de personas que en estas fechas están intentando coronar la cima saliendo desde los diferentes refugios repartidos a lo largo del recorrido. Esta ha sido una sabia decisión, tal y como explicaba Kilian Jornet: “Ayer estaba un poco nervioso porque nos costó decidir la hora de salida. Finalmente ha sido una muy buena opción, porque a esa hora hacía muy buen tiempo y no he tenido que ponerme el cortaviento y además no había nadie en la montaña así que he subido sin problema”.


El clima y las condiciones con las que se ha topado Jornet han sido muy favorables, con buenas temperaturas y sol hasta en la cima, donde ha llegado 1h56'15" después de su salida de Cervinia. Al llegar a la cumbre, se ha parado sólo unos segundos, ha dado la vuelta a la cruz que preside la cima y ha empezado lo que supondría el principal reto de la aventura, la bajada, muy rápida y muy técnica que Jornet ha completado con éxito, llegando al pueblo de Cervinia en 2h52’02’’.
Al llegar al pueblo, Jornet ha explicado que: “Me he encontrado muy bien en la subida, con muy buenas sensaciones. Al principio tenía mucho calor pero poco a poco he ido cogiendo ritmo y altura y me he sentido mucho mejor. Llegar a la cima ha sido un momento muy especial. La bajada también ha sido perfecta, estoy contento porque no he tenido que tomar muchos riesgos. He resbalado un par de veces, pero nada importante. Cuando estaba llegando a Cervinia me he sorprendido muchísimo, realmente pensaba que seria extremadamente complicado conseguir batir el récord

 De esta manera, el atleta de la Cerdanya supera en 22 minutos el récord que el italiano Bruno Brunod había establecido el año 1995, con un tiempo de 3h14:44, y que siempre fue uno de los referentes de Jornet. En esta ocasión, Brunod ha querido estar al lado de Kilian en los días previos a la travesía para darle consejos, compartir su experiencia y animarlo al máximo. Cabe destacar que Brunod realizó 30 ascensos antes de decidirse a intentar el record, además de ser un gran conocedor de la zona. Es por todo ello que la ayuda que ha aportado a Jornet es inestimable. Hoy, Brunod ha acompañado a Jornet durante una parte del recorrido.
El momento más emocionante ha sido a la llegada, como explicaba Kilian: “Cuando faltaban pocos metros para llegar a la meta, Bruno ha venido a correr conmigo. Ayer Bruno me dijo que haría 2:52, ¡parece que me conozca mejor que yo mismo! Mientras estábamos llegando a Cervinia me iba repitiendo el tiempo. Para mi es el momento con el que me quedo de esta experiencia, ha sido muy emocionante, si estoy aquí es por personas como Bruno, que me inspiraron desde que era pequeño”.

Por su lado, Kilian Jornet ha estado preparando esta ascensión desde hace dos semanas, en que ha subido ocho veces a la cima para hacer un reconocimiento del recorrido. Asegura que una de las claves del Cervino es conocer muy bien el recorrido, ya que eso ayuda a ganar mucho tiempo. A pesar de ello, reconoce las complicaciones y el reto técnico que suponía este proyecto. Para prepararse lo mejor posible, el atleta ha vivido durante casi un mes en su furgoneta en Cervinia, con el objetivo de tomar contacto con el terreno y conocer la ruta con la mayor precisión posible. Si en el Mont Blanc Kilian Jornet estuvo acompañado de su amigo Mathéo Jacquemond siguiendo las premisas del proyecto Summits of My Life, en esta ocasión ha hecho la expedición solo. Jornet explicaba que: “El terreno aquí es muy diferente, ya que al haber tantos puntos de escalada nos habríamos tenido que esperar el uno al otro, y por lo tanto no tenía mucho sentido hacerlo acompañado”. A pesar de ello, y en las diferentes ascensiones que ha realizado, amigos y familiares se han desplazado hasta Cervinia para acompañarlo en los reconocimientos, darle consejos y aportarle su apoyo.

Igual que en las pasadas ediciones, Seb Montaz ha estado acompañando a Jornet para filmar todos sus movimientos durante la carrera. En este caso, y debido a las circunstancias orográficas del terreno, Montaz ha filmado la acción desde un helicóptero mientras que Vivien Bucher, que ya les había acompañado en el Mont Blanc y que también es guía de montaña, ha supervisado la seguridad y ha aprovechado para tomar imágenes desde diferentes puntos del recorrido.
Además de él, un total de 6 personas entre guías de montaña y personal de protección civil han estado presentes en la zona para velar por la seguridad del atleta durante todo el recorrido. Como reconocen Jornet y Montaz, el conjunto del valle se ha volcado en esta expedición, y han expresado su agradecimiento por todo el apoyo recibido al conjunto de guías, los habitantes de la región y todos los que han colaborado a que este proyecto sea una realidad.
Una vez más, los valores y la filosofía purista que inspiran a Jornet han estado presentes en esta ascensión, que ha hecho sin asistencia y con el mínimo material posible: “Para mí la superación y el respeto serian los valores que destacaría de este record. Conseguir este tiempo y poderme igualar con Bruno es todo un honor para mí, y sin duda será el recuerdo más bonito que me llevo de esta experiencia”.
Después de esta expedición al de la Cerdanya sólo le quedará viajar a Rusia para intentar completar el ascenso y descenso del Elbrus (5642m), la montaña más alta de Europa y que completaría este año 2013 de Summits of My Life.

sábado, 17 de agosto de 2013

Al Petrechema con tranquilidad

Salimos desde la “tasca” de Linza, no habíamos vuelto a este lugar tras el mal sabor de boca que nos dejó cuando nos alojamos allí realizando la Senda de Camille. Empezamos a caminar sin tener el objetivo muy claro, no sabíamos si intentar la mítica Mesa de los tres Reyes o subir al Petrechema, lo decidiríamos más adelante, durante un buen tramo el camino es común.

Si a este refugio no se llegase en coche...
Preciosa flor pirenaica
Llevamos un paso suave, nos pasaron varios grupos, yo pensaba que la mayoría de ellos tenían la intención de ascender el pico más alto de Navarra ya que a todos se les veía con ganas y sobrados de fuerza. Durante el ascenso me percaté que había marcas rojas y blancas de GR al regresar a casa descubrí que se trataban de una variante de la GRT 13 que lleva hasta la localidad francesa de Lescun. Por el camino nos encontramos un lirio blanco, que según nos contaron sale uno cada 10000, así que se podría decir que tuvimos suerte.

Uno entre diez mil
Collado de Linza. Mesa o Petrechema
Feliz cual pastorcilla
Pico Acherito
Íbamos muy tranquilos y sobre todo disfrutando del estupendo día que hacía por lo que nos costó llegar al de Collado de Linza casi dos horas, ahora tocaba decidir. Observo que la mayoría de la gente va al Petrechema, quizá sea lo más acertado, hoy no habíamos madrugado mucho y además, como he comentado, el paso que llevábamos no era muy vivo. Llaneamos un poco, en el lugar había varios rebaños de ovejas y cabras que pastaban impasibles a nuestra presencia. Antes de rodear un pequeño montículo por su izquierda contemplamos al otro lado del valle el Pico Acherito.

Ultima rampa
Nubes y montaña
Agujas de Ansaberet
Cima del Petrechema
Llegamos al último tramo, un largo pedregal, pero que se deja subir con facilidad por su arista. Como no podía ser de otra forma en la cumbre coincidimos con varios grupos de los que nos habían pasado. Echamos un vistazo a la vertiente francesa y por fin vemos las agujas de Ansaberet, era uno de los motivos para subir hasta aquí. Aunque pronto la niebla y las nubes bajas las ocultan a nuestra vista.

Otra cima a nuestras piernas
Nubes sobre el valle
De regreso a Linza
Bajando por la pedrera nos encontramos a unos franceses que suben con las bicis a cuestas ¡qué bárbaro! bajar por allí sobre dos ruedas se me antoja suicida. Regresamos a Linza por el mismo camino bastantes satisfechos, no ha sido una ascensión muy dura pero me ha parecido preciosa, ahora ya tenemos la mente puesta en atacar La Mesa de los Tres Reyes en un futuro cercano.

Track de la ascensión

viernes, 16 de agosto de 2013

Chipeta desde Tacheras

Había que aprovechar el puente de Agosto y nada mejor para sacarle todo el partido que acercarnos un par de días a Zuriza.
La primera excusión que hicimos fue al Chipeta. Salimos desde el aparcamiento de Tacheras, dirección Este siguiendo las marcas de la GR-11. El primer sol de la mañana apenas nos deja ver y casi no pudo hacer fotos ya que el astro rey aparece en primer plano. En un principio había muchos caminos dibujados sobre el terreno y un paso algo peligroso ya que se había desprendido parte del terreno por erosión. Poco a poco fuimos superándolos y el camino fue mejorando e incluso salvamos algún barranco.

A primera hora de la mañana
Pinos a contraluz
A por otra cumbre
Al cabo de una hora nos desviamos a la altura de la Cabaña de Chipeta, que por cierto se encuentra en muy mal estado. Subimos por una loma repleta de hierba en la que no había un camino claro. Nos resultó algo largo y costoso, aunque no teníamos el objetivo a la vista sabíamos en la dirección que desviamos ir. Casi después de media hora subiendo por la ladera llegamos a la cima del Chipeta. Aunque había una ligera bruma las vistas de Guarrinza, el castillo de Acher y el ibón de Acherito eran excelentes.

Cabaña de Chipeta
Ladera interminable
Sierra de Alano
Cima a la vista!!
Coincidimos en la cima con un francés y con otra pareja de Zaragoza con los que estuvimos conversando un rato mientras observábamos volar los buitres sobre nosotros. Tras un rato en la cima bajamos al collado de Petraficha. El plan original era intentar el Petraficha y luego el Quimboa Alto pero decidimos dejarlo para otra ocasión, habían anunciado tormentas para la tarde y el sol picaba bastante así que con la suerte que estábamos teniendo este verano pensamos que era mejor no arriesgar y bajarnos por el mismo camino.

Castillo de Acher y Selva de Oza
Ibón de Acherito
Otra cima mas
Guarrinza
La verdad que el Chipeta tiene una excelentes vistas pero la subida desde Tacheras para mi gusto es bastante sosa y aburrida, realmente no la recomiendo.

Al final la tormenta se retrasó un poco pero por la noche fue espectacular ver caer los rayos sobre la sierra de Alanos

Track de la ruta

sábado, 3 de agosto de 2013

Peña Tendeñera

Un año más volví a quedar con Diego para disfrutar de un día de montaña. Los tres miles que habíamos estado mirando todavía tenían algo de nieve en sus cimas y nos podíamos encontrar algún tramo que entrañase alguna dificultad técnica, como somos un poco “vaguetes” y no nos apetecía llevar el peso de los crampones, nos decantamos por un pico algo más al sur. Tras estudiar las distintas posibilidades Peña Tendeñera fue el seleccionado. De las diferentes vías que hay para su ascensión elegimos la que se inicia desde Linas de Broto.

Camino en el barranco Sorrosal
Puente de la Mercera
Cascada en el camino
Objetivo a la vista
Primero recorrimos los casi 4 kilómetros del barranco Sorrosal metidos entre zona sombría, paralelos al rio y atravesando pequeñas zonas de cultivo abandonadas. Llegamos al Puente de la Mercera, lo cruzamos y tras un par de requiebros del camino nos presentamos en frente de una pequeña cascada. Superada alcanzamos una enorme pradera, a partir de ahora íbamos a echar de menos la sombra del bosque. Dejamos a un lado el Refugio de la Faja. Ahora nos tocaba remontar el barranco de Suaso, en aquel valle no estaba dibujado un camino claro pero sabiendo que nos dirigíamos a un cuello que quedaba al fondo a la izquierda tampoco había mucho problema.

Al fondo las Crestas de Año
El camino se empieza a complicar
Así durante un buen rato
Vista atrás
Llegar al collado supuso algo de esfuerzo había bastante desnivel pero una vez superado aprovechamos para descansar, hidratarnos y tomar alguna barrita energética, aun nos quedaba un buen trecho hasta la cima. Pronto volvimos al camino que cogimos por una pequeña barranquera. Enseguida nos encontramos metidos en un mar de grandes bloques de piedra en el que más de una vez tuvimos que utilizar las manos para no perder el equilibrio. Gracias a los pequeños hitos y al sentido de la orientación de Diego pudimos seguir el camino en aquel caos pétreo. Llegamos a la famosa chimenea, nos costó encontrarla. Un enorme hito, que a nuestro juicio estaba mal ubicado nos despisto bastante, lo intentamos por varios sitios pero nada, estaba imposible. Casi estuvimos a punto de darnos la vuelta, cuando de repente algo más a la izquierda apareció ante nuestros ojos. Con una pequeña trepada subimos por ella aunque con alguna dificultad ya que es bastante estrecha lo que limita un poco los movimientos. Por si alguien desea echar una cuerda está equipada para asegurarse.

Puff. ¡Vaya paliza!
Chimenea vista desde arriba
Ya va quedando menos
Vista desde el collado
Dejamos atrás el escollo de la chimenea y llegamos a un circo. Bordeamos un nevero para tirarnos en dirección al cuello que forman Peña Tendeñera y el Mallo de las Blancas. Alcanzar el collado supuso bastante esfuerzo ya que que atravesar un canchal de esos en los que das un paso adelante y caes dos atrás. Al final con algo de sobrealiento llegamos al collado, las vistas que obtuvimos del otro lado fueron impresionantes, incluida la vertiginosa caída que se veía bajo nuestros pies. Hasta la cumbre ya solo nos quedaba un tramo de cresteo en el que tuvimos que volver a utilizar las manos. Después de un ratillo añadimos otra cima a la colección. Hacia un día bastante bueno y aunque había alguna nube alta el paisaje se dejaba ver. La sierra de la Partacua, lo picos de siempre: el Anayet, el Midi, Vignemale, el Perdido, pero lo que más me impresiono fue la vista de Ordesa aunque desde nuestra posición estaba parcialmente tapada por el Pico Otal (lo pongo en mi lista de pendientes).

Solo nos queda esto
Pero no es fácil
Al fondo la Sierra de la Partacua
Una mas, Diego
Merece la pena subir aquí
Como siempre lo mejor de hacer cima, a parte de las vistas, es lo bien que sienta el bocadillo que además fue amenizado por un ultraligero que paso a escaso metros de nosotros. Por desgracia tocaba volver, en vez de retornar por el mismo camino volvimos en dirección este. Nada más empezar tuvimos que pasar un corto pero vertiginoso paso aéreo, habitualmente no suelo tener vértigo pero este paso me dio bastante impresión. Diego prefirió pasar a cuatro patas y bien que hizo, estos pasos hay que hacerlos como más seguro te encuentres. Después del subidón de adrenalina bajamos a buen ritmo, este camino estaba bastante mejor que por el que habíamos subido. Pasamos por debajo de las paredes que forman las Crestas de Año en las que pudimos ver claramente como anidaban multitud de buitres.

Complicado paso aéreo
Camino de bajada
Crestas de Año
Por aquí vimos difícil bajar
Estoy reventado y aun me quedan 4 Km.
En vez de descender por una canal que parecía bastante complicada rodeamos la Fañariza Alta para meternos en un vallecillo debajo del Pico Otal, quizá fuese algo más largo pero el camino estaba bastante mejor, el problema es que nos equivocamos y nos pasamos el lugar por donde debíamos cruzar el barranco de Planas D’abozo y cuando nos dimos cuenta ya era bastante tarde. Decidimos seguir hasta el Refugio de la Faja para tomar el camino de esta mañana que debido a los kilómetros y el desnivel que llevábamos acumulados en las piernas se nos hizo algo pesado.
Ya solo queda esperar al próximo año para intentar otra cumbre, posiblemente el Arriel

Track de la ruta