Cuando leí que The Godfathers actuaban de nuevo en Zaragoza una vena nostálgica invadió mi cuerpo, eche la vista atrás y recordé aquella noche que los vi en la carpa de la Chimenea junto a los "Immaculate Fools" y los sonrojantes "La Frontera". Habían pasado casi 21 años de aquella actuación y la curiosidad por comprobar cómo les había tratado el tiempo y las ganas que siempre tengo de ver rock en directo hicieron que me pasase por el Plata.
Los hermanos Coyne
Llegue algo pronto, en las entradas suele poner una hora de comienzo que supongo debe ser orientativa. Poco a poco el recinto se fue llenando, pese a ser un lunes la sala cálculo que alcanzaría los tres cuartos de aforo. Eso sí, la media de edad del publico superaba los cuarenta. Con la banda sonora de Goldfinger entraron en el escenario “los padrinos” ahora convertidos en cuarteto. Enseguida Peter Coyne cogió el micrófono y al grito de “Zaragoza haced ruido” empezaron a sonar los acordes de “Cause i said so”, para a continuación empalmar con “She gives me love” dos de sus temas más celebres con lo que dejaron claro que el paso del tiempo y la casi una década de inactividad no les había hecho mella.
The Gofathers continuan llenos de energia
Al ver a Peter Coyne, ya entrado en año y trajeado, da la sensación que pudieras estar delante de un médico, un profesor de universidad o un abogado, pero al verlo desenvolverse sobre el escenario te das cuenta que ha salido directamente de la grada de Stamford Bridge. Esa mirada desafiante, esa pose arrogante y esa enérgica forma de cantar son el sello inconfundible de esta banda.
El concierto, que no dio el mas mínimo tiempo para el respiro, se centró principalmente en sus dos primeros discos aunque también sonaron un par de temas de reciente factura “Back into the future” y “I can’t sleep tonight”. El que escribe que suele ver los conciertos algo estático no pudo parar de mover la cabeza de adelante hacia atrás en la casi hora y veinte de actuación.
Cerraron la primera parte del concierto con el himno “Birth, School, Work, Death” y el público totalmente entregado. Acto seguido volvieron a salir al escenario para ofrecernos tres canciones en los bises entre ellas la que cerró definitivamente la actuación “Cold Turkey”, versión que hicieran del tema de John Lennon en su primer disco.
No pude salir más contento del Plata, había vuelto a ver a una gran banda y lo que es mejor en plena forma.
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